Con nuevas polémicas, Valle del Cauca repite elecciones
Tres candidatos se disputan la gobernación. Expectativa por abstencionismo y voto en blanco.
En medio de nuevas polémicas, los vallecaucanos volverán a las urnas este sábado, luego de que los últimos dos años han tenido dos gobernadores seguidos suspendidos y tres provisionales.
La situación ha generado llamados de los gremios a la estabilidad política, pues por malos manejos y demandas el departamento está 'quebrado financieramente', con un saldo en rojo de más de 762.000 millones de pesos, que llevaron a acogerse a la Ley 550 o de insolvencia.
En estas elecciones, con tres candidatos, vuelve el fantasma del abstencionismo, que en las pasadas elecciones fue del 49 por ciento, pero ahora aparece el voto en blanco como un cuarto candidato con relativa fuerza.
Y también, como en las campañas anteriores, esta estuvo marcada por las denuncias de guerra sucia y de participación del excongresista Juan Carlos Martínez, condenado por parapolítica y ahora investigado por un caso de narcotráfico, quien ha sido relacionado con los gobernadores suspendidos Juan Carlos Abadía y Héctor Fabio Useche.
Martínez, quien ha sido considerado el poder en la sombra en las dos anteriores administraciones, dijo en el momento de su captura el jueves: "La gente sabe por quién votar". Y este viernes, en una entrevista para EL TIEMPO, aunque dijo que no está apoyando a ningún candidato, agregó: "Si pudiera ejercer mi voto, lo haría por Francined Cano".
La inestabilidad política del departamento es una de las situaciones que preocupan a la Cámara de Comercio de Cali. "Desde el Gobierno nacional nos ven con cierta preocupación, no se ha podido garantizar estabilidad y llevamos seis meses perdidos este año", dijo su presidente ejecutivo, Roberto Arango.
Los candidatos son el conservador Ubéimar Delgado; Francined Cano, quien ante la falta de respaldo de su partido, 'la U', consiguió el aval del MÍO, partido relacionado con los destituidos gobernadores y el polémico Martínez; y Carlos Arbey González, que va por el Polo.
Las recriminaciones, entre veladas y directas, han estado por el lado de Cano y Delgado, considerados los más opcionados por sus respaldos.
A Delgado se le ha cuestionado la falta de un título universitario, mientras que a Cano se le cuestiona el aval de un partido en entredicho y su inexperiencia en cargos públicos. Los dos se defienden. Cano, cuyo padre es diputado por 'la U', expresa que "tras 10 años apoyando todo tipo de elecciones, tenía el derecho". Sobre los cuestionamientos de que detrás de él está Martínez, Cano dice: "Tengo el aval del MÍO, pero el que va a gobernar es Francined Cano".
Delgado, por su parte, dice que ha habido en su contra una guerra sucia.
"Ha sido muy descarada de injurias, incluso una campaña compró la distribución de un periódico para insertar su programa de gobierno, pero insertaron fue un panfleto donde aparece una mujer desnuda y colocan "Ubéimar Delgado otra vez a la cárcel", cuando nunca he estado en la cárcel", agrega.
En relación con la falta de un título universitario, dice que tiene cuatro décadas en la política, lo que le ha dado el conocimiento para llevar el destino del Valle.
González, en medio de la discusión, comenta que "la campaña se ha convertido en un asunto morboso y no han dejado valorar propuestas ".
La baraja de la que saldría el gobernador del Valle
Ubéimar Delgado
Nació en Riofrío. Tiene 60 años y los últimos 24 los ha dedicado a la política. Conservador, su primer cargo público fue como comunero de Cali. Ocupó en tres periodos una curul en el Concejo de la ciudad y un escaño en la Cámara de Representantes durante dos periodos (1998 y 2006).
Francined Cano
Nació en Buga, tiene 40 años y 3 hijos. Es administrador de empresas, con estudios en gerencia de salud y administración pública. Fue gerente regional de Caprecom EPS Valle y exgerente regional de Coosalud. Excandidato a la alcaldía de Buga y a la Cámara de Representantes.
Carlos Arbey González
Caleño, de 51 años, con tres hijos. Durante tres décadas ha estado vinculado a la Universidad del Valle, donde se desempeñó como presidente del Sindicato de Trabajadores. En la misma universidad estudió sociología. Esta es la primera vez que aspira a un cargo de elección popular.
La caída de dos mandatarios
La destitución de Juan Carlos Abadía, en mayo del 2010, fue por participación política tras una reunión en la que estuvo el entonces precandidato Andrés Felipe Arias, y luego la suspensión de Héctor Fabio Useche, poco después de asumir este año, se debió a un contrato como miembro de la junta de la Licorera del Valle, que habría causado un detrimento patrimonial de más de 40.000 millones de pesos al departamento, hacen parte del desgreño administrativo que vive la región desde entonces. Las destituciones de Abadía y Useche llevaron al nombramiento provisional -entre una y otra- de Francisco Lourido, Aurelio Iragorri y Adriana Carabalí.
El voto en blanco quiere ser protagonista
Frente a estas candidaturas el voto en blanco aparece como otra propuesta, con el respaldo del movimiento Progresistas, con el exgobernador de Nariño Antonio Navarro a la cabeza, y también las excandidatas a la alcaldía de Cali -en diferentes elecciones- Margarita Londoño y María Isabel Urrutia (Polo), el dirigente liberal Miguel Yusti y Héctor Galindo, de la dirección municipal del Partido Verde, entre otros.
"La inmensa mayoría de los congresistas del Valle que respaldan a los candidatos más opcionados hacen parte de la clase política y partidos que tiene al Valle en esta crisis y otros en las cárceles. Además fueron escogidos en 'encerronas', sin consensos", coinciden.
Los 152.000 votos del blanco en las pasadas elecciones les dan a los promotores de este voto optimismo de superar al candidato que tenga el mayor número de votos.
"En forma concertada se elegiría un candidato con el compromiso de un manejo transparente, cero corrupción y respeto total por los recursos públicos", dicen Navarro, Yusti y Londoño.
El abstencionismo es otra gran incógnita
En la pasada contienda fue del 49 por ciento, casi la mitad del potencial electoral de 3'095.765. Por eso se creó la campaña 'Ahora más que nunca vote', de la Unidad de Acción Vallecaucana.
Nicolás Orejuela Bueno, director ejecutivo del grupo, señala que siempre se declara la responsabilidad de la crisis a la dirigencia política, y claro que la tiene, "pero también somos responsables por la apatía y falta de participación cuando estos espacios democráticos permiten procesos de transformación".
Y frente al voto en blanco, dice que es un derecho consagrado en la Constitución, pero podría llevar de nuevo a una ausencia de gobernabilidad y a prolongar el retroceso que vive el Valle del Cauca.
Luis Manzano, líder comunitario, dice que "esta desgracia política del Valle es un reflejo del panorama nacional, de políticos sin interés en el servicio público y solo con ánimo de lucro, o que ven el poder como una cuestión de ego personal".
eltiempo.com